miércoles, 14 de enero de 2009

The Blue Colorado Band



El otro día revolviendo en la caja de antiguas fotografías me encontré esta joya de mi adolescencia, mirándola me viene el recuerdo nítido del que fue para mi un momento único, recuerdo perfectamente el día, digo esto porque no había en esos tiempos demasiadas maquinas fotográficas al alcance nuestro, fotografiarnos en grupo fue algo bastante novedoso, me viene a la memoria los recuerdos de tantos amigos, algunos de ellos que todavía siguen a mi lado, pero otros pasaron por mi vida y poco o nada se de ellos.
La época donde esta tomada la instantánea era la de los últimos años de la dictadura, todavía era le España cerrada y oscura, mirarla da una imagen real de cómo éramos la gente de los nuevos barrios de la capital, todos nacidos Madrid y ejerciendo con chulería y orgullo de ello, la gran mayoría éramos hijos de inmigrantes, éramos la ultima generación de padres y abuelos que poblaron el Madrid del antes y después de la Guerra Civil.
La imagen esta tomada en la Ciudad los Angeles “La City” como la llamábamos entre nosotros, este barrio era el mío, esta situado en el distrito de Villaverde, al sur de la Capital, un barrio construido al principio de los años 60.
La foto dice mucho de los nuevos y contundentes cambios que se avecinaban por esos primeros años setenta, las nuevas tendencias se reflejan con una claridad absoluta , el “look” que teníamos era un mal conjunto entre Rocker, Progre y Hippie, todo esto conjugado hacia de todos nosotros un aspecto algo “Macarra”, pero era lo que se llevaba (no dejéis de observar los zapatos de alguno de nosotros con tacón y pequeña plataforma que era lo más Heavi, claro que los calcetines blancos de mi amigo Pepe era algo único, por no hablar de la hebilla de mi cinturón), pero sobre todas las cosas la que más nos preocupaba en esos tiempos era el pelo, hacia poco tiempo que habíamos dejado el clásico corte de pelo a maquina, con la cabeza bien rasurada y flequillo bien alineado, cambiamos directamente al pelo largo, eso visto desde ahora parece una minucia, pero pasar el día a día con esa mirada fija y de pocos amigos de tu progenitor, era algo que costaba más de una bronca en casa.
En esa época, ya habíamos empezado a trabajar casi todos los que habíamos decidido no seguir estudiando, eso significaba tener algo de poder económico, no mucho, pero algo más, eso nos permitía al menos una de vez al año salir de compras por el centro de Madrid, solíamos ir a una tienda de ropa que había al principio de la calle Arenal, allí nos comprábamos unos vaqueros de la marca “Blue Colorado”, se comentaba que para que te quedaran bien ajustados había que meterse en la ducha con ellos puestos y dejar que se secaran, (francamente yo nunca lo hice y estoy seguro que seria porque mi madre no me dejo), en la misma tienda y también de la misma marca nos comprábamos la “Chupa Vaquera”, luego ya con las dos prendas en la bolsa, y para rematar, nos íbamos a El Rastro a por unas buenas botas camperas.
Madrid se empezaba a mover, era la época de los grandes grupos, el Rock y el Blues se empezaba a difundir por las ondas, por encima de todas la emisoras estaba Radio Centro, con el Mariskal Romero al frente y su programa nocturno “Musicolandia”, un programa que revoluciono la presencia del Rock progresivo en nuestro país, nos deleitaba en su programa con temas de Ten Year Alter de Alvin Lee , a Rory Gallagher, Led Zeppelín, The Rolling Stones, Janis Joplin, The Doors, Jimi Hendrix, Eric Burdon & The Animals, Jethro Tull, Pink Floyd, cada noche nos ponía algo inusual, algo nuevo, algo para comentar entre todos al día siguiente. También fue Vicente Romero al que se le debe el lanzamiento de tantos grupos españoles como Mermelada, Obús, Leño o Barón Rojo.
En esos tiempos apareció por algunos kioscos la revista o más bien fanzine “Disco Expres” primera revista que se dedicaba por entero al Rock and Roll, donde solían escribir Jesus Ordovás y Gonzalo Garcia Pelayo, fue la decana de las publicaciones posteriores de música en este país.
Esa época era también la de los grandes conciertos en directo, ya fuera en el Alcalá Palace, el Pabellón de la Ciudad Deportiva del Real Madrid o en el Teatro Monumental, en estos acontecimientos tuvo que ver y mucho Vicente Romero, pudimos asistir por primera vez en nuestras vidas y con una fuerte presencia policial (el régimen franquista controlaba todo y eran las autoridades policiales las que debían autorizar cualquier tipo de concierto de carácter artístico) a ver en directo a grupos como Golden Earring, Santana, Status Quo, Chicago, Jethro Tull, Uriah Heep, Blue Oyster Cult, John Mayall, Genesis, Flying Burrito Brothers, Canned Heat (esta última banda a los que yo no pude ver con todo el dolor de mi alma).
Por esos tiempos estaba abierta la Discoteca M&M de la calle Bejar, 9, una sala pequeña llena de encanto, cerca del metro de Diego de León, era un local de referencia para toda la gente que tenia las mismas inquietudes que nosotros, allí era donde también podíamos escuchar en directo a grupos extranjeros como Mick’s Abrahams Band, Greenslade, gran banda anglosajona de rock sinfónico, o Geordie, grupo de rock and roll donde empezó el vocalista actual de AC&DC Brian Johnson, también la sala fue cuna de los conciertos en directo de grupos de aquí, como mis admirados Burning. Pepe Risi, guitarrista fallecido de esta banda, se refiere a ella en un articulo “La discoteca "M&M" era la única que ofrecía conciertos de Rock, una música considerada por la opinión pública, de maricones, pendencieros, chulos y algunos adjetivos más, así que cuando había algún concierto de Rock, no se podía hacer publicidad”.
Los domingos por la mañana nos juntábamos todos y nos dirigíamos al El Rastro, íbamos a ver al "El Rubio" un avispado personaje que vio con claridad lo que se avecinaba, él traía de importación a sus estantes los discos que no llegaban a editarse en nuestro país, ya fuera porque algunos estaban censurados, o simplemente porque los responsables de las grandes compañías discográficas no los consideraban rentables, este personaje clásico de El Rastro hizo que muchos de nosotros nos pasáramos las semanas ahorrando para podernos llevar a nuestro plato del tocadiscos las grandes obras maestras del Rock and Roll, más adelante se abrió en Madrid una tienda que también fue referencia para todos se llamaba PATO DISCOS y estaba situada en la calle Ardemans, muy cerca de la sala M&M
De todo esto que relato hablábamos a diario en la calle, en nuestro "Botellón" sin botellas, pegados a la pared, en esa pared donde estamos inmortalizados, en donde pasábamos muchas horas juntos, donde empezo a pulirse nuestra personalidad, éramos todos grandes amigos.
El ver la foto me ha llevado a un pasado muy lejano, pero siempre he dicho que hay que recordar el pasado y soñar con el futuro.

UNA NOCHE SIN TI
(Burning)


Son las tres de la mañana,
y yo sin poder dormir,
doy mil vueltas en mi cama,
sólo pienso en ti.
que sé yo, si estoy tan solo,
no puedo hablar con nadie
que sé yo, si estoy tan solo,
necesito tu amor.
Dan las seis, sintonizo a los Stones,
recuerdos del pelo largo,
viejos blues, queridísimo Eric Burdon.
Un sonido muy lejano llega a mis oídos
es el ruido de un cerrojo que abre una dulce llave
y que sé yo, si estoy tan solo,
quizás sólo sea un sueño.
Que sé yo, si estoy tan solo, necesito tu amor.
Dan las seis, sintonizo a los Stones,
recuerdos del pelo largo,
viejos blues, queridísimo Eric Burdon.
Dan las seis, sintonizo a los Stones,
recuerdos del pelo largo,viejos blues, queridísimo Eric Burdon...

En la foto de izquierda a derecha
Antonio Guerra, Fernando Cordero, Fernando Juarez, Vicente "Pelli", Pepe Arias, Angel Mora, Luis y Pedro "El Mentiroso"


3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Pedro el mentiroso, no fue el que aprendió a nadar en un charco?.

Anónimo dijo...

Pedro el mentiroso: ¿No fue el que aprendió a nadar en un charco?.

Anónimo dijo...

¡Qué hermosa crónica, Fernando! Da gusto leerte y así compartir tus entrañables recuerdos de adolescencia.
Cris